Hoy es el día, no pienso dejar pasar un minuto más sin hablar contigo, sin dejar lo todo definitivamente claro entre nosotros, ahora hemos vuelto los dos destrozados, los dos maltratados y con heridas, y quiero vivir, y vivir contigo porque si tú no estás esto no es vida.
Entro en tu casa la puerta está abierta aunque creo que siempre lo estuvo para mí, desde que me viste plantando las flores frente a tu ventana pero habría dado igual de estar cerrada porque nada podría interponerse hoy y menos algo tan banal, esta vez necesito llegar a ti. Tus ojos se alzan desde el papel en el que escribes con letra pausada, sé que son tus recuerdos, y sé que yo formo parte de ellos.
- Katniss – te digo acercándome a ti – necesito hablar contigo.
Me miras desde la distancia de la habitación mientras te levantas para acortarla – yo también lo necesito, no me atreví a buscarte, pero ahora estás aquí - me dices, llegando a mi lado.
- Debiste hacerlo, yo te esperaba – ¿Cómo puede estar tan tranquila?
- No sabía, yo creí… - duda
- ¿Qué creíste? - le pregunto.
- Creí que no querías verme, que te había dañado demasiado, soy mala para ti, cuando estoy cerca solo pasan cosas malas – contesta mirándome con ojos tristes.
- No es cierto hiciste soñar a la gente y me hiciste soñar a mí, en la arena, al despedirte en el camino al capitolio, al pedirme que no me dejara vencer, que recordara, no he venido antes solo porque temía hacerte daño, quizás aún es pronto pero no lo puedo retrasar más, siento que este es el momento – digo tomando su mano entre las mías, siento frío en es a piel, y las froto para calentarlas.
- Siempre fuiste el valiente en esta relación – me dice ella guiándome hasta el salón, sin soltarse de mi tacto.
Intento asimilar sus palabras ¿Cuándo fue lo nuestro una relación?. Todo tan embarullado el lio de sentimientos amor y odio, odio y amor. Preguntas sin respuesta, respuestas concertadas y ensayadas para engañar a la gente. Las mismas que terminaron casi por engañarnos a nosotros mismos.
La chimenea está encendida comienza a refrescar y es reconfortante acercarse al calor de las llamas, llevo tanto tiempo sintiendo el frío de su ausencia...
- Siéntate conmigo – me invita a dejarme caer en la mullida alfombra y lo hago todo lo rápido que mi pierna me permite, ella ya está sentada y reprime una mueca de dolor – lo siento, tu pierna.
- Tranquila no pasa nada, sólo tardo un poco más – mi sonrisa parece tranquilizarla, me acomodo en el suelo y la miro de frente, quiero comenzar hablando yo – quiero que entiendas que lo que voy a decirte no es un ultimátum no hay reproche, solo quiero aclarar de una vez por todas lo que siento ahora y frente a frente, tu y yo.
- Te entiendo Peeta siento igual es el momento de decirnos la verdad – entrelaza sus manos con las mías y me mira fijamente cuando comienzo a hablar.
- Tengo que confesar que a veces, no me gusta tu forma de ser, luego te me desapareces y no entiendo muy bien por qué
Su sonrisa aflora a los ojos grises que me miran – No pensé que serías tan directo pero tienes toda la razón entiendo que soy demasiado… huraña, estoy demasiado encerrada en mi propio dolor, nunca he tenido en cuenta tus sentimientos… - comienza a decir cuando la callo con un dedo en sus labios, sintiendo de nuevo ese contacto que me quema y me electriza a la vez.
- Déjame seguir, por favor ya sé cómo eres no me tienes que contar. No dices nada romántico cuando llega el atardecer, te pones de un humor extraño con cada luna llena al mes.
- ¿Solo una vez al mes? – Me sonríe torcido mientras su cara se llena de tristeza - mejor di que tengo horas de normalidad.
- Katniss, por favor déjame terminar – digo mirando suplicante su expresión, muevo las manos nerviosamente porque de nuevo desnudaré mi corazón ante ella como en la playa, como siempre he hecho – quiero abrirte de nuevo mi corazón y esta vez será la última no quiero cansarte con mis palabras repitiéndolas hasta que pierdan sentido, ¿oíste los que acabo de decir? ¡bien!... eso es lo malo de ti, pero todo lo demás le gana lo bueno que me das, solo tenerte cerca, siento que vuelvo a empezar.
En su cara se refleja la sorpresa, ¿Qué creyó? ¿Qué alguna vez deje de amarla? – ¿Así lo sientes? – Pregunta - ¿aun?
- Katniss es parte de ti. Yo te quiero con limón y sal, luces y sombras yo te quiero tal y como estas no hacen falta cambiarte nada... Yo te quiero si vienes o si vas, si subes y bajas si no estás segura de lo que sientes… , pero no volveré a hacerlo Kat, ahora sabes lo que siento y sé perfectamente que no puedo obligarte a sentir igual, y si me pides que te olvide, no podré complacerte pero me alejaré y no volverás a verme, no te molestaré más.
Su cara refleja confusión ante mis últimas palabras, sus manos vuelan a mi cara, apartando con suavidad el cabello que cae sobre mi frente, delineando con suaves dedos las cejas, las pestañas, el mentón y por ultimo mis labios… lentamente haciéndome cerrar los ojos por la sensación. Se pone de rodillas y se acerca a mí dejando la leve caricia de un beso sobre ellos, me duele cuando se aparta, abro los ojos y lo que veo me transporta a otra dimensión, hay ternura y amor en su mirada, se queda así mientras habla mientras su boca desgrana lo que nunca creí oír.
- Mi chico hermoso, mi diente de león, eres igual por fuera y por dentro ¡perfecto!, en tu interior siempre me has visto como no soy, sacas lo mejor de mí solo contigo me he sentido libre y amada ¿Cómo puedo responder a eso si yo nunca fui buena con las palabras?.
- Solo te pido que lo intentes, por favor… inténtalo.
- De acuerdo, por ti… Tengo que confesarte ahora, nunca creí en la felicidad, a veces algo se le parece pero es pura casualidad. Toda nuestra vida ha sido una lucha por sobrevivir a la muerte desde niña, desde que viajamos a los juegos y ahora me siento perdida, no sé si tengo porque luchar.
- Lo tienes… - le digo - por nosotros, solo si tú quieres ¿merece la pena luchar por vivir?
Sonríe levemente como saboreando algún viejo chiste - ¿sabes Peeta? Os oí... – la miro extrañado ¿a qué se refiere? – a ti, y Gale os oí, y no quiero que pienses que es cierto lo que dijo, no me quedaría con nadie solo por sobrevivir, eso ya lo hice… con él consiguiendo comida en el bosque cuando mi padre nos dejó, contigo en los juegos… dos veces – ahora su mirada se oscurece – aunque… no supe protegerte muy bien, mientras tu… siempre velaste por mí. Intentaron robarte lo más preciado aquello que siempre deseaste mantener ¿recuerdas? – asiento - si voy a morir quiero que sepan que no les pertenezco, quiero morir siendo yo mismo…. Eso dijiste y al final no pudieron con una parte de ti, tu esencia siempre está en el fondo, al final lo conseguiste .
- Yo no estoy segura, en mi caso me envenenaron de otro modo, me robaron todo lo que ame de mil formas diferentes, cuando casi me matas sentí que te había perdido para siempre y el mundo pareció hundirse bajo mis pies. Impediste mi suicidio cuando maté a Coin y no podía entenderte… deseaba morir no quedaba nada a lo que aferrarme en el mundo. Volví al distrito y el tiempo se removía delante de mi puerta, la gente pasando como a cámara lenta hasta que volviste tú y me llenaste de flores blancas, me hiciste recuperar el pulso de la vida sólo con la mirada, y ahora cuando no se bien como seguir adelante, te plantas en mi puerta y me abres tu alma ¿dices que no es un ultimátum ?, pero me ofreces alejarte de mí como una prueba más de amor, me haces perderme de nuevo y como en otro tiempo, luego me vengo a encontrar, con tus ojos me dan algo más, ¡Dios mío!, esas pupilas tan azules que me observan con el color del cielo, el color de la inmensidad, ¿sabes que hacen conmigo? Me dan la vida y la muerte si no me miran, solo tenerte cerca, siento que vuelvo a empezar.
No sé si entiendo bien lo que me está diciendo por fin me abre su alma usando las palabras y me dibuja nuestra historia como si de un cuadro se tratara, me añora , me extraña, no es por supervivencia ¡quiere volver a empezar!.
- ¿Conmigo? ¿Quieres empezar conmigo a vivir de nuevo? – pregunto esperanzado.
La risa sale de su boca y suena cristalina rodeo su cara con mis manos y ella vuelve a besarme, hasta que el aire nos falta, no quiero soltarla no dejo ni un centímetro de ese rostro sin acariciar con mis labios.
- Si, grandísimo tonto, que sacrificas todo por mi amor, no podría existir en el mundo nadie más afortunada que yo, porque a pesar de todo te sigo conservando y no quiero volver a perderte nunca más, Peeta…Yo te quiero con limón y sal, tus luces y tus sombras esas que te dejó Snow aunque intentaras matarme ahora mismo... merecería la pena solo por haberte podido confesar lo que tanto tiempo he guardado bajo la llave de mi silencio, escudándome en mi miedo y en mis dudas, pero eso no pasará más yo te quiero tal y como estas no hace falta cambiarte nada. Yo te quiero si vienes o si vas, si subes y bajas si no estás seguro de lo que siento.
- Katniss – me siento el hombre más feliz del mundo por lo que acabo de oír - ¿estás segura de lo que dices? ¿Me eliges realmente por mí, no solo porque Gale no vuelve? ¿Es por mí?
- Es por ti y por nosotros – ríe con ganas y me vuelve a besar – ese gran corazón es todo cuanto siempre necesité, se paró el mío también cuando chocaste con aquel campo de fuerza, no imaginas lo que sentí... y tú sigues siendo un tonto por dudar, ¿no has tenido suficiente con mis estúpidas dudas?
- Te quiero Kat – la beso en la cara, en los párpados sus mejillas y su boca esta vez tan dulce para mí, sin obligaciones ni amenazas, solo por nosotros dos.
- Te quiero, amor Solo tenerte cerca, siento que vuelvo a empezar ¿Ahora te alejarás de mí? - La pregunta tiene una respuesta clara.
- ¿Alejarme? Ahora nunca te librarás de mí, ahora sí y para siempre estaremos juntos ¡no voy a dejarte marchar!
____________________________________Ari a.
Hace un tiempo terminé la trilogía de los Juegos del Hambre y lo siguiente fue escribir sobre ellos, nunca antes habia escrito nada, o al menos no lo habia puesto ni en papel ni en pantalla, esta es una de las historias que hice, en un conjunto que se llama "Canciones del Distrito Doce" y que se inspiran en canciones que elijo al azar o porque me las recuerdan, incluyendo las letras en la propia historia. Dicho esto, si las he publicado en otros portales y con otro nick, pero siempre fuí yo (^.^) antes no tenía blog.
Los personajes pertenecen a Suzanne Collins, la historia básicamente es la de los Juegos del Hambre sólo que adapté las situaciones y dialogos a las canciones que he ido eligiendo, por lo que esta parte me la inventé. XD PTKT
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